Siempre tengo la sensación de estar hablando demasiado, incluso cuando no digo nada. Será que pienso en exceso y siempre tengo algo que contar. Ya nadie parece interesarse en compartir, en unir. Cada cual, con sus pensamientos, a su insomnio. Será que ya no queremos pensar. Seré yo.

Comentarios

Entradas populares de este blog