¿Quién habrá ahí fuera que tenga mis mismas dudas, mis mismas preguntas? Todo el mundo parece igual entre sí y tan distinto a ti porque no has encontrado a quien sea como mirarte en un espejo. Sólo en ese momento el mundo deja de parecerte un lugar tan enorme y dejas de sentirte aislado. Eso creo.

¿Alguna vez has escuchado una conversación ajena y te has quedado anonadado ante la lejanía de su contenido? Jamás te habría preocupado ese modo de pensar, ese modo de ver. ¿No te ha pasado que has intentado tener una conversación y antes de llegar al punto la otra persona había escalado una montaña diferente de cosas que no tenían nada que ver?

Nunca me preocupó que hablasen mal de mí, aunque sé que lo hacen. Nunca me preocupó no ser el centro de una fiesta. Nunca pensé que para alguien fuese importante tantas cosas que nunca pensé. Y entre tantos esas cosas son comunes, y para mí son tan lejanas y ajenas e indiferentes, que no sé si quiero ser más como ellos o encontrar a alguien que sea más como yo (aunque la idea me asuste).

Comentarios

Entradas populares de este blog